Isabel Cortés: “La pandemia nos ha hecho conscientes de hasta qué punto es necesaria hoy la innovación y la propiedad industrial”
Licenciada en Derecho con especialidad en derecho europeo por la Universidad CEU San Pablo y Doctora por la Universidad Nacional de Educación a Distancia, con Máster en Propiedad Intelectual por la Universidad Pontificia Comillas y Máster Europeo en Derecho y Economía por las Universidades de Hamburgo y Gante, Isabel Cortés es la directora técnica del Máster en Propiedad Industrial, Intelectual, Competencia y Nuevas Tecnologías, y la directora de Relaciones Internacionales de PONS IP.
Su currículum es muy extenso. Cuenta con más de 23 años de experiencia en el campo de la Propiedad Intelectual, y tiene una larga trayectoria en el ámbito académico. Es también coordinadora y docente en el módulo de Signos Distintivos y Diseño Industrial impartido por PONS Escuela de Negocios e ISDE y el curso de Propiedad Intelectual impartido en el Colegio de Abogados de Madrid, entre otros. Está incluida en The World’s Leading Trademark Professionals desde 2017.
Hablemos del nuevo curso del Máster en Propiedad Industrial. ¿Qué destacarías?
Este año tenemos récord de alumnos. Estamos especialmente orgullosos de contar con cuarenta alumnos llegados de toda la geografía española y de distintas partes del mundo. La variedad de perfiles formativos con los que contamos es enormemente positiva de cara a compartir sus experiencias y el estudio de una materia repleta de oportunidades. La participación y los debates que pueden surgir en torno a la materia impartida en clase van a potenciar su aprendizaje. Además, el equipo de profesores y ponentes van a transmitir su pasión por la materia que se verá recompensada cuando al final del año académico los alumnos se incorporen al mundo laboral dentro de la IP.
¿Y académicamente? Algo que puedas resaltar con respecto a las anteriores ediciones.
PONS Escuela se caracteriza por superarse en cada edición, por ofrecer una formación ligada a la actualidad y comprometida con el mundo de la empresa. La propiedad intelectual siempre ha sido un campo interdisciplinario, combinando el derecho, la economía, la ciencia y la ingeniería; su relación con la investigación, la innovación y las patentes, sin olvidar las marcas, los temas de competencia y de autoría. Quizá ahora más que nunca, el uso de las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, el Internet de las cosas o la cadena de bloques, se abren paso en el ecosistema de la innovación y suponen un potencial enorme. Tenemos nuevos retos a los que hay que dar respuesta desde el punto de vista jurídico. Por eso temas como las redes 5G, la robótica, el Big data o la impresión 3D y su aplicación han cobrado fuerza dentro del programa, demostrando que la propiedad intelectual es un derecho dotado de un gran dinamismo.
Hablamos de nuevos retos, de digitalización, de transformación digital, de un nuevo horizonte regulatorio en lo que Europa llama la década digital, pero nos ha tocado vivir una pandemia. ¿Crees que la situación que hemos vivido en este último año y medio ha impulsado la proliferación de las nuevas tecnologías?
Sí y no. La pandemia ha acelerado los procesos de transformación digital y ha hecho que seamos más conscientes de hasta qué punto es necesaria la innovación para enfrentarnos a los nuevos desafíos que tenemos como sociedad. Las vacunas, los tratamientos médicos, los sistemas de prevención y seguimiento, todos ellos han demostrado la importancia de las herramientas e instrumentos jurídicos que proporciona la propiedad intelectual para una eficaz gestión de la pandemia.
La demanda de profesionales formados en Propiedad Industrial e Intelectual también, ¿no?
La especialización de la materia requiere de profesionales formados y cuanto mayor es el dinamismo en el sector, mayor es su necesidad. Así que podríamos decir que los expertos en PI siguen siendo un perfil demandado por el mercado. A su vez, el abanico de salidas profesionales es amplio, despachos, empresas, consultoras o el sector público, entre otros, por lo que nuestra experiencia es que los alumnos se incorporan pronto al mercado laboral.
Acercándonos al módulo que coordinas, ¿cómo has enfocado el curso de Signos Distintivos y Diseño Industrial? ¿Qué novedades van a encontrar los alumnos tanto en el contenido como en el profesorado?
Nuestro objetivo para este módulo es doble. Por un lado, trabajamos para lograr el equilibrio perfecto entre la teoría y la práctica. Los alumnos tienen que salir preparados para incorporarse al mundo laboral y aportar en su práctica profesional. Por otro, buscamos ofrecer a los estudiantes del máster una visión internacional, con la participación de profesores de diferentes jurisdicciones que compartan las particularidades de sus sistemas y experiencias. Esto permite al alumno establecer comparativas y enriquece transversalmente su conocimiento.
Por último, ¿cuál es la importancia de una marca o un signo distintivo para una empresa?
La marca es un activo esencial en la empresa. No solamente distingue nuestros productos y/o servicios de los ofrecidos por terceros competidores, sino que supone toda una declaración de intenciones sobre quienes somos. La marca transmite nuestros valores y ofrece confianza a los consumidores. De ahí que las distintas elecciones que vamos tomando en su proceso de creación, protección, vigilancia y gestión sean de vital importancia para su éxito como elemento diferenciador.
Desde PONS Escuela de Negocios formamos no sólo a los nuevos profesionales que demandan las empresas, sino también a los profesionales en activo, aquellos que necesitan reforzar alguna de las áreas que ven en su día a día o ese aspecto que les hace falta para asumir más competencias y evolucionar dentro de su empresa o departamento. Tal y como señala Isabel Cortés, la marca es un activo esencial en la empresa, el esencial para que un cliente confíe en un determinado producto o servicio. Por ello, es preciso que los especialistas en signos distintivos y diseño industrial tengan los conocimientos necesarios que el cliente espera para conseguir que su marca tenga la imagen que el usuario final espera de ella.